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A los hombres les gustan las tetas. Sophia Loren, Salma Hayek, Jane Russell, Ursula Andress, Pamela Anderson... todas ellas fueron o son mujeres dotadas de una poderosa pechuga. Por eso se cuentan por millones el número de sus seguidores. A la estirpe de esas tetonas pertenece Diletta Leotta.
¿Que quién es Diletta Leotta? Seguramente, la presentadora de televisión más hot de toda Italia. Una modelo que ha estado varios años restransmitiendo partidos a pie de césped de la primera división de la liga italiana de fútbol (Serie A), un bombón de más de 30 años de edad que tiene, al menos, dos poderosas razones (cada una situada a un lado del esternón) para haberse convertido en toda una estrella de la televisión.
Fueron esas dos poderosas razones de las que hablamos las que hicieron que la gradería del gol sur del napolitano estadio Diego Armando Maradona bramara un día, ante la cercanía de la presentadora, "¡Fuori le tette!,¡ fuori le tette!, ¡fuori le tette!..." La expresión no necesita traducción. Todos hablamos un latín más o menos distinto.
Y es que... ¿cómo resistirse a la atracción que despierta en nosotros ese par de melones que parecen estar siempre a punto de romper la contención de la blusa o de la camiseta que pretende embridarlos? ¿Y si vestida ya deslumbra la moza, cómo no va a hacerlo con los pechos al aire?
Diletta Leotta desnuda es un canto a la sensualidad, un monumento a la lujuria. La siciliana, cachonda y desacomplejada en la intimidad, no contó con que un hacker entrara un día en su intimidad para hacer públicas imágenes de una Diletta Leotta hot a más no poder. Desde ese día, la napolitana es algo más que una presentadora de televisión. Es un mito erótico, el sueño turbio de adolescentes y no tan adolescentes. Un oscuro objeto del deseo.
En esas fotos de las que hablamos, que dieron la vuelta a Italia y a buena parte del mundo, Diletta se coge las tetas, las junta, las manosea y las muestra a la cámara de forma impúdica mientras hace carantoñas y muecas.
En esas imágenes de las que hablamos, la star italiana proyecta la imagen de una mujer que se siente muy a gusto con su cuerpo y que experimenta y concibe la desnudez como algo muy natural y, ¿por qué no decirlo?, divertido.
Teclear en el buscador Diletta Leotta Instagram supone enfrentarse a un inacabable catálogo de fotos hot de la presentadora napolitana. En todas las poses, en todas las posturas, con un sinfín de paisajes y escenarios de fondo...
Y es que esta rubia de ojos claros es sexy a rabiar. Su cuerpo de Barbie, su mirada juguetona y provocativa y el poderío de esas mamas con las que la diosa Naturaleza la ha adornado la convierten en fotogenia pura. Imposible que la cámara no se enamore de ella. Imposible que no lo hagamos nosotros.
Las tetas de Diletta Leotta deberían ser Patrimonio la Humanidad como lo son muchos monumentos italianos. ¿Qué tienen los Palacios Vaticanos que no tengan esas tetas? ¿Cómo no se nos va a poner el miembro como la torre de Pisa cuando contemplamos esas bufas generosas y excepcionalmente bien puestas? Mirarlas y pensar en inacabables cubanas es inevitable. Nunca la expresión eyaculación corporal adquirió tanto sentido como mirando esos maravillosos senos.
Pero los pechos no son el único encanto de esta preciosidad meridional. Hemos citado la belleza de sus ojos. En ellos hay un algo de falsa inocencia que resulta muy morboso. Bien podrían ser los ojos de una jovencita que está deseando dejar de ser virgen. Que pide caña. Y pocas cosas nos gustan más a los hombres que ver cómo se nos ofrecen las vírgenes. Después de todo, el de romper hímenes es una de nuestras fantasías eróticas más arraigadas.
Y, por supuesto, no olvidemos el excepcional culo de la Leotta, ese trasero que quita el hipo. Lo hemos visto, obscenamente en pompa, mostrándolo todo, en esas imágenes robadas de las que hablábamos. En una de ellas, y ayudándose de su móvil y de un espejo, la presentadora nos ofrece una maravillosa visión de su vulva, su ano y su trasero. Cuenca debe estar al fondo, pero lo que nos ofrece Diletta en primer plano es el Paraíso Terrenal.
Colocada a cuatro patas, en la postura del perrito, ofreciéndose entera tal y como se muestra en esa imagen, esta belleza treintañera resuelve todas las dudas que pudieran surgir al preguntarnos: ¿cómo debe ser Diletta Leotta follando?
Hablar de sus fotos porno es hablar de una potra indomable que, arrebatada de deseo, se muestra absolutamente insaciable. Y al hablar así lo hacemos con conocimiento de causa. Hemos visto cómo esta joven se comporta con las cosas del sexo y, ciertamente, no se le puede poner un pero.
Más que una presentadora de partidos de fútbol, Leotta parece una pornstar. Seguramente sabe más de felaciones y enculadas que de fueras de juego.
Los vídeos de los que hablamos nos muestran a una mujer disfrutando sin complejos del sexo y no dejan lugar a la imaginación. En uno de ellos, la presentadora se embadurna las tetas con nata y embadurna también la polla de su amante para, a continuación, y con una soberana mamada, limpiársela a conciencia.
Verla entregada a la penetración suplicando a su amante que se la meta nos hace soñar con su culo, su coño y, por supuesto, con sus exuberantes tetas. ¿Cómo no pensar en un polvo salvaje cuando nos enfrentamos a la visión afrodisíaca de esta diva de la televisión y el sexo. Os dejamos que soñéis con nosotros.
